El futuro del trabajo

Me viene como un mareo cuando me hablan del futuro, más si se trata “del futuro laboral”.

Varias veces me he preguntado por qué me pasa esto y creo que hoy por hoy es lo que le sucede a bastante gente. Nadie quiere verse 40 años haciendo lo mismo hasta morir. Para la generación de nuestros abuelos o padres el “hacer carrera” en una empresa o institución era el sueño de muchos, levantarse todos los días, dejar a los niños en el colegio e ir a trabajar de ocho a una y de tres a seis, de lunes a viernes, hasta que un día te ascendían y tu oficina era un poco más grande, hasta que un día te regalaban un reloj y un diploma por haber dejado tu juventud al servicio de otros y ya todo se había acabado.

Pero no quiero ser negativa, ni menos denostar a esa gente esforzada que aún hoy se esmera por permanecer en un lugar y llegar lo más alto que pueda en ese espacio. Simplemente siento que eso no es para mí y a varias personas le pasa igual. Entonces cuando me hablan “del futuro del trabajo” uno piensa:

“Me están preguntando qué voy a hacer en lo personal o para donde vamos como sociedad o raza humana?”.

El mero cuestionamiento filosófico que supone descifrar lo que está detrás del enunciado da ganas de echarse una siesta, sin embargo están muy ligados.

Si hablamos del futuro del trabajo en términos generales la respuesta es fácil, basta con ver las actuales tendencias: las personas buscan experimentar, no soportan mucho tiempo en el mismo sitio, en más de una ocasión durante la vida las personas tendrán la inquietud de emprender o tomarse años sabáticos y todos quieren ganar más trabajando menos, incluso en países como Holanda se han promovido leyes para reducir la semana laboral a 4 días de trabajo y tres de descanso. Esto sucede porque hemos llegado a un punto donde entendimos que el tiempo que dejamos en la faena no es devuelto y que finalmente trabajar en algo que no te llena, es básicamente vender tiempo de vida que no le dedicaste a tus hijos, mascotas, plantas o a ti mismo.

Entonces, si me preguntan qué voy a hacer en el futuro yo contesto que no tengo idea, más bien podría decirse que hay uno o dos planes bajo la manga, el resto es improvisación. En cambio si me preguntan hacia dónde creo que va el trabajo en el futuro, pienso que la modalidad remota ganará cada vez más terreno. El pequeño pánico que se ha sembrado a través de la idea sci-fi de que para el futuro próximo un alto porcentaje de las funciones que hoy realizan humanos serán reemplazadas por máquinas ha hecho que algunos enciendan la luz de alerta, pero no sacamos nada con preocuparnos, las máquinas van a reemplazarnos igual y todo lo que dice Terminator es cierto.

Lo que debemos hacer es ocuparnos de nosotros mismos, escucharnos, preguntarnos frecuentemente si somos felices en lo que hacemos, si estamos haciendo bien lo que hacemos o si estaríamos más a gusto en otro sitio, e incluso si fuésemos más lejos, preguntarnos si seríamos un mejor aporte en otro sitio y no en el que estamos. Creo que está bien migrar y cerrar ciclos breves en lo que al trabajo se refiere, es sano y honesto que el dinero sea una consecuencia de hacer lo que nos gusta y no una recompensa insuficiente a una vida de sacrificios que a nadie le importan. Si me preguntan qué es para mi el futuro del trabajo no me dan ganas de contestar como si tuviera una bola de cristal en frente, vaticinando cómo será el mercado laboral en veinte o treinta años más, sólo puedo augurar desde mi experiencia en el hoy que el futuro está en la autoconciencia humana, algo que nunca podrán suplir las máquinas.

Entonces, la tarea está en el trabajo personal señoras y señores, en humanizar nuestras conductas, generar redes de colaboración sólidas, no pasar a llevar al resto e ir dejando lo mejor que podamos en cada lugar donde trabajemos, para que al momento de aburrirnos y querer cambiar el rumbo vayamos dejando palitos en el puente y no dinamitando nuestra única vía de regreso en caso de que nos toque retroceder.

En 9punto5 no leemos las cartas ni adivinamos el futuro, pero nos gusta reflexionar y ser honestos con los temas que nos preocupan a todos, por eso te compartimos nuestros puntos de vista sin temor.

Nos vemos entre el 6 y 8 de septiembre en la tercera versión de 9punto5 para hablar de esto y más.